viernes, 13 de agosto de 2010

JUVENTUD MAS RECIENTE

Llamad a la vida,

Haced fuerte a la palabra,

Sacad a pasear vuestras ideas,

Que no os agite el viento la calma.



Coged un lápiz,

Hacedlo vuestra fiel espada,

Golpead con el puño pero sin daga,

Cantad las canciones que el corazón canta.



Soñad, porque eso os hará fuertes,

Y no sé si esto es el final de mi juventud

Más reciente,

Quizás aquí nazca la madurez más temprana

En la orilla de la mujer que me ama.



Esconded la timidez en un sábana,

Saltad, la vergüenza no llega a donde

Vuela mi alma.



Amad y que os amen,

Quered y dejad que os quieran,

Hacedlo sin miedo a nada,

Dos soldados en el refugio de su cama.



Coged mi vida,

Deshacedla con estas palabras,

Agarrad mi mano,

Esa que no veis

pero sentís a vuestro lado.



Difundid mis palabras,

Hoy la persona ha hablado.

martes, 10 de agosto de 2010

NO ME CANSO DE LLORAR HERMANO

Que viuda quedo la tierra,
Qué triste quedo la vida,
De luto se viste el alba
Que hizo muda a mi lira.

No acostumbra mi casa
A sentirse desnuda de gracia
Las margaritas de mi ventana
Se marchitaron con tu marcha.

Salió el rio en la oscura mañana
No forzó la rima de mi corazón la palabra,
No me canso hermano
De llorar tu sueño sobre la eterna cama.

Que cerca de mi descansa tu vida,
Que lejos de mi vive tu alma,
Se hizo de arena hermano
El velero donde navegabas.

Partió tu alma mi vida
Salió la esperanza a tu busca,
Fue por la senda perdida,
Hoy me la encuentro escondida
De llanto perfumada.

lunes, 9 de agosto de 2010

COMO QUIERES HERMANO

Dime como quieres hermano,
como olvido el suspiro de la palabra,
que acuna el alba impaciente sobre su cama
y que aguarda el llanto incansable de tu almohada.

Como te digo hermano,
Valentía no me sobra y vergüenza no la tengo,
que llevo de amante una navaja,
yo te la hinque en el alma, tu húndemela en el pecho.

Ay hermano, que son los silencios de vuestras palabras
Los susurros de sus lamentos,
Palabras, con la que su boca te dice te quiero,
Silencios, con los que su corazón me dice me muero.

Pero Hermano, que no te engañen esos besos,
Esos que siembra en sus adentros,
Que la tierra no espera, y el fruto se impacienta
Y al final se los lleva ese que la riega,
Sea o no el agua que la alimenta.

Ay hermano, como nos da la tierra
La misma sangre, el mismo llanto,
el mio nace en el fondo de su alma,
el tuyo muere en el fondo de un océano.

Cuanto te quiero hermano,
La rabia me hierve el corazón
De ser torero en mi tierra,
Y no poder torear, con la espada
Que la razón me deja,
El amor a los que sus besos me llevan.